Las tecnologías van a un paso interesante dentro de la industria automotriz y desde hace años hemos visto a los autos impulsados por hidrógeno. BMW es una marca que ha ido incursionando en esto y nos lo explica de mejor manera.
Actualmente, se está optando por la electrificación de los autos, sin embargo, los de hidrógeno son tecnologías que prometen mucho porque sí darán mejores emisiones, y lo mejor de todo es que también los tiempos de carga serán optimizados.
BMW cuenta con la iX5 Hydrogen, una SUV que ya se vende en diferentes regiones del mundo y que demuestra cómo estas tecnologías funcionan adecuadamente.
Es interesante conocer cómo es que funcionan este tipo de vehículos, debido a que son tecnologías que sí podrían llevarse a otras partes del mundo.
¿Cómo funcionan los autos de hidrógeno?
Primeramente, esta clase de vehículos cuentan con un motor eléctrico, por ello es que son eléctricos, se complementan de las celdas de combustible, y estos mismos van produciendo su misma energía. El hidrógeno del tanque es electricidad y la planta de energía es la celda.
Por otra parte, hay un proceso que tiene la denominación de electrólisis inversa, dando vapor de agua en el escape y por ende, no generando emisiones contaminantes. Un punto destacable, es que estos vehículos recuperan la energía de frenado, así alimentando a una batería.
Los autos de hidrógeno sí se tienen que recargar, afortunadamente este proceso es muy rápido, con solo cuatro minutos como máximo para rellenar el tanque.
Otra gran ventaja es que en el futuro veremos más vehículos de esta categoría. El precio de la recarga es como el de un vehículo a combustión; aparte de que son ideales en cuestión ecológica.
Solo es cuestión de tiempo para que veamos más innovaciones en este tipo de tecnologías y por ende, sí lleguen los vehículos a otras partes del mundo y por ende, más estaciones de carga. Lo bueno es que BMW está innovando en este apartado.
